¿Qué es rojo, qué es azul, qué es gris…? El color siempre ha sido foco de estudio de diversas áreas.
En el diseño gráfico el color es una de las herramientas más importantes al momento de crear una pieza, no solo por el hecho de darle color a los elementos, sino también porque a través de él logramos transmitir sensaciones, emociones, etc.
El color es una sensación que se produce en la visión cuando la luz del sol incide sobre los objetos de la naturaleza y del mundo que habitamos.
Por si no lo sabías, tenemos dos grandes modos de color: el RGB y el CMYK. ¿Por qué le llamamos modos? Porque la naturaleza y aplicación de cada uno es diferente.
Seguramente, hayas escuchado sobre esto. En este artículo pretendemos explicarte de qué se trata y para qué sirve cada grupo de colores.
Características del color
El color cuenta con una serie de características inherentes a todos, tanto para RGB como para CMYK:
1) Tonalidad: nos está indicando el color en sí, es decir, si se trata de verde, azul, naranja.)
2) Luminosidad: cuando hablamos de la luminosidad de un color nos estamos refiriendo al grado de claridad u oscuridad que presenta el color.
3) Saturación: es la pureza o intensidad cromática de un color.
CMYK vs RGB
El RGB es un modo de color que tiene su base en los tres colores primarios: rojo (red), verde (green), y azul (blue). De allí viene la abreviatura RGB.
Cuando hablamos de RGB estamos hablando de un modelo basado en la “síntesis aditiva”, o sea: es posible representar cualquier color por medio de la suma de los tres básicos. Si los mezclamos a todos, obtenemos el color blanco.
Este tipo de color se utiliza en las pantallas y es el que nos permite visualizar, ya que todos los píxeles de un monitor están formados por esos tres colores.
El grupo RGB también es conocido como «colores luz».
Los monitores, pantallas LCD, tabletas, celulares y otros medios digitales muestran todos los colores en este modelo de color, y cualquier color que se vea en una pantalla se compone de porcentajes variables de rojo, verde y azul.
Este sistema de color no es adecuado para la impresión porque los colores son más brillantes.
El sistema de color RGB debe utilizarse sólo en diseños digitales, más comúnmente al diseñar para la web. Esto incluye el diseño de sitios web, imágenes y gráficos para su uso en sitios web, y medios sociales.
En la vereda contraria tenemos el CMYK.
El acrónimo CMYK indica un modelo de color conocido también como cuadricromía. Los colores a los que se refiere son cian, magenta, amarillo y negro. También, son conocidos como «colores pigmento».
Cuando hablamos de CMYK nos referimos a un modelo sustractivo, que trabaja de manera contraria al modelo RGB: el color se obtiene por medio de la diferente luminosidad de cada tono.
Por medio de la mezcla de los cuatro colores podemos obtener cualquiera de los otros colores visibles.
El CMYK es utilizado para la salida de impresión y son los colores de las tintas que tienen los cartuchos de impresora.
Utilizar este modelo de color es muy fácil, ya que las combinaciones de color son mucho más amplias que el modelo RGB
Misma esencia, diferente objetivo…
Ambos modos de color están creados con finalidades diferentes. Conocer bien para qué puedes usarlos y ajustar correctamente los archivos dependiendo el objetivo que tengas con ellos, te permitirá evitarte dolores de cabeza.
No es lo mismo imprimir con CMYK que con RGB. Verás que el RGB se reproduce de una manera incorrecta y poco realista. Tampoco será lo mismo utilizar un diseño digital en RGB que en CMYK. Verás que en RGB los colores son mejor reproducidos y más vibrantes.
Toma en cuenta lo expuesto en este artículo, te ayudará a encaminar de una manera correcta tus proyectos gráficos y el manejo del color.
¡Gracias una vez más por leernos! Te esperamos en nuestro próximo artículo para seguir aprendiendo juntos.
¡Hasta pronto!